La aplicación es un tratamiento de medicina estética que puede realizarse en diversas zonas del rostro y cuerpo, adaptándose a las necesidades específicas de cada paciente. Las áreas más tratadas incluyen las regiones donde la flacidez es más evidente, como las mejillas, el contorno de los ojos, la línea de la mandíbula y el abdomen. También es común su aplicación en el cuello, escote y manos, logrando una mejora notable en la textura y apariencia de la piel. Además, este procedimientos es eficaz para tratar cicatrices, estrías y otras imperfecciones en diferentes partes del cuerpo.

El procedimiento comienza con una consulta inicial para evaluar las necesidades del paciente y diseñar un plan de tratamiento personalizado. Luego, se procede con la limpieza y desinfección de la zona a tratar, seguida de la aplicación de anestesia local para asegurar la comodidad. Los polinucleótidos se inyectan en puntos estratégicos y, finalmente, se realiza un seguimiento de los resultados.

Para minimizar los riesgos asociados es fundamental seguir ciertas recomendaciones. Primero, durante la consulta inicial, informa al profesional sobre cualquier condición médica o alergias que puedas tener. Después del tratamiento, sigue al pie de la letra las instrucciones para el cuidado post-procedimiento, que incluyen evitar la exposición solar directa, no tocar ni frotar la zona tratada y utilizar productos recomendados para mantener la piel limpia y libre de irritaciones. Además, es aconsejable evitar actividades físicas intensas y el consumo de alcohol durante los primeros días para prevenir inflamaciones o moretones. 

Además de las recomendaciones para minimizar riesgos, hay ciertas contraindicaciones que deben tenerse en cuenta antes de someterse a un tratamiento con polinucleótidos. Este no es adecuado para personas con infecciones activas en la piel, trastornos de coagulación o aquellos que están tomando anticoagulantes. Además, se debe evitar en pacientes con enfermedades autoinmunes o que están embarazadas o en período de lactancia. También es importante abstenerse si se tienen antecedentes de reacciones alérgicas a productos similares. 

El procedimiento con polinucleótidos ofrece resultados significativos en el aumento de la firmeza y la apariencia cutánea. Al optar por esta solución vanguardista, podrás observar cambios radicales en la textura y tono, acabando con la flacidez y logrando mejorar el aspecto general de la piel. Los resultados se hacen evidentes en fotos de antes y después, mostrando una piel rejuvenecida en su forma natural, con una pigmentación más uniforme y una reducción notable de las imperfecciones. 

¿Es seguro realizar el tratamiento en zonas sensibles como alrededor de los ojos o los labios?

El proceso es seguro para su aplicación en zonas sensibles como el área alrededor de los ojos o los labios. Estas áreas, que suelen mostrar marcas de envejecimiento más tempranamente, pueden beneficiarse gracias a sus propiedades regenerativas y de hidratación profunda.

¿Este tratamiento puede prevenir el envejecimiento futuro o solo trata las marcas actuales?

El procedimiento no solo actúa sobre los signos actuales, sino que también tiene un efecto preventivo. Al estimular la producción de colágeno y elastina, fortalece la estructura de la piel y aumentar su capacidad de renovación, lo que ayuda a retrasar la aparición de nuevas marcas de envejecimiento. Este enfoque preventivo lo convierte en una opción ideal para quienes buscan mantener una piel joven y mejorar la apariencia a largo plazo.

¿Qué diferencia hay entre los polinucleótidos y otros tratamientos de rejuvenecimiento?

Los polinucleótidos se diferencian de otros procedimientos de rejuvenecimiento por su enfoque en la restauración y renovación celular a nivel profundo. A diferencia de procedimientos como los rellenos dérmicos, que aportan volumen inmediato, estos trabajan fomentando la regeneración natural de la piel, mejorando su calidad general, haciéndola más resistente y joven de manera sostenida.